Capitulo 88 - Un reencuentro...

—¡Al fin estás aquí!—

Varios días después...

Sonó el despertador. Tenía que alistarme, hoy llega Celeste.
Me levanté de la cama, me puse las pantuflas y me fui al baño para poder ducharme y vestirme.
Es viernes, mi mamá trabaja, y no tengo clases por una reunión importante de profesores. Me alegra, que ya no soporto estar un minuto más en la escuela. Necesito un momento de relajación, donde pueda pensar  bien las cosas sin ningún apuro.
Los minutos pasaron y ya había terminado de ducharme, así que me sequé y me vestí. Quedé así:

 (dirán: mucho rosado, niña. Pero, me gustó como quedó. Si no les gusta imagínenlo de otro color ^^)

Al terminar de vestirme me peiné un poco, y luego salí para ir a la cocina. Al momento en que entré le di comida a  mi cachorro, y me preparé el desayuno. Gabe bajó para desayunar conmigo.

—Oye —me habló al terminar—, iré a casa de un amigo, ¿ya?
—Ya, pero te cuidas —sonreí.
—Si...—me dijo algo fastidiado.

Salió de la casa echo polvo y me quedé sola junto al perro. Me miraba moviendo su cola, cosa que me hizo gracia y me puse a reír. Me paré de la silla y fui a abrir la puerta para que saliera al jardín trasero. Luego, volví a donde estaba.

(...)

Estaba en mi habitación viendo la televisión, cuando de repente siento que tocan el timbre. No bajé, solo me asomé un poco a mi ventana para saber quién era, y cuando veo...

—¿Pero qué mierda quiere? —pregunté gritando, pero en mi mente.

Mi papá...mi papá allá afuera, ¿qué no se cansa de hacer esto? Solo quiero estar tranquila, ¡quiero que me deje en paz de una maldita vez!. ¿Por qué tiene que hacerlo más difícil de lo que ya es? No quiero volver a verlo en mi vida, no quiero, ¿cuantas veces tengo que repetirlo?. Me fastidia, me fastidia demasiado.  ¡Que guarde sus tontas palabras, que se quede callado de una vez!

Me oculté rápidamente para que no me viera, y me acosté en mi cama lo más rápido que pude. Como Gabe y mamá  no estaban, de seguro pensaría que no hay nadie en la casa, porque yo no salgo ni muerta. Solo quiero estar tranquila. No lo necesito, para nada.

—¡Sé que estás ahí, __________(tu nombre)! —chilló alguien. Pude notar que era la voz de él.

Estoy muerta. ¿Logró verme cuando me asomé? No me importa, de todos modos no salgo. Me quedo aquí mismo sin mover ni un pie.

Él seguía llamándome desde allá afuera, no se callaba nunca. Que se joda, ya lo dije: No saldré. Me quedo aquí. ¡Pero que por favor se calle de una maldita vez!.
Me levanté de la cama con furia, abrí la ventana y chillé:

—¡Déjame en paz de una maldita vez, que no hay nadie, carajo! —dicho eso cerré la ventana.

Lo sé, lo que dije fue algo estúpido, de no haber nadie en la casa no me habría asomado por la ventana para gritarle. Fue algo estúpido de mi parte, pero no me interesa ni en lo más mínimo. No quiero estar cerca de él, ni muerta.

(...)

Tocaron la puerta, me sentí rara, porque era imposible que "él" pudiera entrar sin una llave para la puerta de afuera.
Bajé lentamente para abajo, y abrí, también lentamente. Eran Rocky y los chicos.

—Oye, tu papá quiere entrar...¿lo dejo? —me preguntó ella.
—¡No! —respondí rápidamente, con un tonto de voz algo alto— No necesito que entre.
—Okey...

Entraron todos. Estaba Ryan con Cindy, Chaz con Lily, Chris con Rocky y yo sola. Era la única que estaba sin una pareja, sentía que estaba tocando el violín, así que trataba de hacer como que iba a mi habitación a hacer algo, o que iba a la cocina a limpiar alguna cosa. Quería que pudieran estar como novios sin que sintieran como pena por mi, ya que soy la única sin una pareja.

—¿Él es tu padre? —me preguntó Ryan, cuando de una vez por todas me senté en un sofá individual.
—Sí —respondí—, él es. Pero ignoren que él esté allá afuera —sonreí, aunque por dentro me sentía mal.
—Debe estar muriendo de calor allá afuera —comentó Chaz.
—Es cierto... —lo apoyó Chris.
—Mmm...—pensé— No, no lo creo.

Dicho eso me paré del sofá y vi la hora en mi celular. Eran las 02:15p.m. Tengo que ir a buscar a Celeste.

—Bien, debo irme —les dije.
—¿A donde? —me preguntó Cindy. Los chicos solo miraban.
—Voy a buscar a una prima al aeropuerto...—les conté sonriendo.
—¡Es cierto, verdad que hoy llega! —exclamó con emoción Rocky— Ya quiero conocerla -sonrió.
—¿Qué hacemos aquí entonces? Vamos a buscarla —dijo Ryan con un tonto gracioso— El auto está afuera.

Todos se pararon de donde estaban sentados, y abrimos la puerta para poder ir a buscarla. Al abrir la puerta que daba para la calle, los chicos subieron al carro, solo faltaba yo, que iba atrás. Papá se acercó a  mi y trató de tomarme la mano.

—¡Déjame! —exclamé— Por favor, vete, ¿si? ¡déjame en paz, que no te quiero ver!
—Pero hija, yo...—interrumpí.
—¡Aléjate de mi! —le pedí casi rogándole— ¿¡qué no ves que esto me duele!?
—¡Solo quiero arreglar las cosas! —exclamó él, con una expresión de tristeza.
—¡Yo no! ¿te ha quedado claro ya?

Dicho eso me subí al carro. Cerré la puerta, dejándolo ahí solo. Los chicos no dijeron ni una palabra, y Ryan echó a andar el auto. Sé que saben que  esto es difícil para mi.

Yo...no quiero mentir, la verdad me siento como la mismísima mierda por hacer eso, pero no quiero hacer algo lindo por él. Me abandonó y quizás jamás se lo perdonaré. Es algo que es muy difícil para mi, y si a alguna chica le ha pasado esto, estoy segura de que me entenderá, porque es difícil, es complicado, es...algo que no tiene una descripción, simplemente es todo lo malo, todo lo que es capaz de lastimar a una persona.

Íbamos camino al aeropuerto, cuando vimos por la ventana a Jeydon y a Jake sentados en la acera. Ryan paró el carro para que pudiéramos saludarnos, y nos bajamos.

—¡Hola! —los saludé.

Me fui directo a darle un abrazo a cada uno de ellos. Les he agarrado muchísimo cariño.

—Hey bro's, ¿qué hacían? —les preguntó Chris.
—Haciendo nada —respondió Jeydon.
—Es cierto, solo pasábamos la aburrición —dijo Jake riendo y todos hicimos lo mismo.
—¿Nos acompañan? —les preguntó Ryan.
—Vamos al aeropuerto —les informé.
—Lo que sea para pasar el aburrimiento —dijo Jeydon riendo.

Todos nos metimos al carro, y nos fuimos camino a buscar a mi prima.

(...)

Nos bajamos del carro. Mi prima de seguro ya había llegado.
Comenzamos a caminar hasta donde estaban todas las personas reunidas.

—Woow...está lleno de extranjeras lindas...—dijo Ryan mirando como desesperado.
—Si sigues mirando, estará lleno de dientes en el piso —lo amenazó Cindy.

Todos nos partimos de la risa por lo de Ryan y Cindy. Fue demasiado gracioso.

—Tranquila amor, que solo tengo ojos para ti...—dijo él sonriendo.
—Más te vale —Cindy siguió amenazante.

Volvimos a reír todos juntos. Ryan tragó saliva todo asustado haha.

—¡Celeste! —la llamé demasiado fuerte, cuando al fin pude verla.
—¡__________(tu nombre)! —me nombró cuando me vió.

Ambas comenzamos a acercarnos casi corriendo, tratando de pasar por entremedio de toda esa gente que estaba esperando a sus familiares. Al estar lo suficientemente cerca nos abrazamos lo más fuerte que pudimos, como todas unas hermanas.

—¡Tanto tiempo, niña! —le dije en su oído, con una sonrisa en la cara, sin soltarla.
—¡Demasiado! ¡ya quería verte! —me dijo ella con una voz que se notaba que era de felicidad.

Nos separamos luego de unos segundos, y nos miramos a los ojos. Ambas teníamos un brillito de felicidad en ellos. Era espectacular.

—¡Hey! —la molesta voz de Ryan interrumpió el lindo reencuentro— Ya, que no es el fin del mundo —comenzó a cagarse de la risa.
—Eres pesado —lo fulminé con la mirada.
—Ya, que era broma...—hizo una pausa— No, no lo era. Ya, caminen que nos vamos, rápido rápido.

Comenzó a empujarnos a todos tanto como pudo hasta que llegamos al auto.

—Hey, aún no me quiero ir —dijo Chris.
—¿Qué?, ¿por qué, Chris? Nadie te pidió tu opinión —dijo Ryan.
—Pero es que tengo hambre, maldito bueno para nada.
—No hay dinero, idiota, y no me llames así —lo enfrentó Ryan.
—Yo tengo —dijimos los demás, menos Ryan y Celeste.
—Los espero en starbucks —dijo rápidamente Ryan y se fue caminando sin decir nada más.

Antes de seguir a Ryan para ir a starbucks, dejamos las maletas de Celeste en el auto y cuando ya estaba todo listo nos fuimos para allá.
Comenzamos a reír, y nos fuimos caminando a starbucks lentamente. Al llegar, Ryan no estaba, quizás fue a una tienda, no sé, pero no importa.
Nos sentamos y compramos lo que queríamos. Nos pusimos a conversar. Celeste ya estaba conociendo a los chicos, pero no hablaba con Jeydon. Jeydon la miraba, pude darme cuenta de eso, pero ninguno de los dos se dirigía la palabra.


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Hola, chicas, ¿cómo están? espero que estén excelente (:
Me siento mucho mejor que los otros días, y logré terminar el capítulo. Lo siento, sé que es corto, pero algo es algo y trataré de subir lo más pronto posible. La escuela está pesada, salgo a las 4:30 de la tarde todos los días y es muy pesado :|
Chicas, ¿saben qué? ¡me regalaron un osito de felpa y un chocolate! ¡Sí! Conocí a un chico hace 1 mes, vamos en la misma escuela. Él siempre se porta hermoso conmigo, es tierno, linda persona, no es como muchos idiotas que  hay...Ayer me llamó y me entregó el osito con un chocolate, yo juro que casi me desmayo, ¡jamás habían hecho eso por mi!. Y hoy...me cantó mirándome fijamente a los ojos una canción del grupo "Camila", le costaba, porque estaba nervioso al igual que yo. Dios...me quedé para adentro, fue tan lindo...

¡Muchísimas gracias por su apoyo, mis shawtys! son lo mejor, y gracias a sus comentarios en las entradas y en el chat. Son lo máximo. Ahora trataré de escribir más seguido si tengo más tiempo. Son unos amores.

¡Las amo! (:
¡Muuuuuuuuuuuac's!