26 de marzo de 2014

Capítulo 36 -Por un capricho.


Ya me había esperado esto, o tal vez no, pero anoche lo pensé por un momento. Ahora supe que había pensado bien. Se sentía mal por lo ocurrido, ¿quién no lo estaría? Pero al final no quiero culparlo por nada. O sea, metafóricamente, nada de eso habría pasado de no venir. Pero ese no es el punto, el punto es que pasé uno de los momentos más lindos a su lado, definitivamente. No porque me hayan regañado me voy a enojar con él o le tiraré todo lo malo que me dijeron encima. 

- No te sientas mal por nada, ¿por qué deberías hacerlo? –le dije, haciéndome la tonta. De esta forma sería más fácil hacerlo cambiar de opinión, según yo.
- ¿Cómo no hacerlo? Fui a tu casa sin pensar en las consecuencias, por mi culpa tu padre te dijo no sé que cosas, pero lo que sí sé es que fueron malas.
- No interesa nada de lo que me dijo, a mi me da igual, de hecho –aclaré.
- No te da igual, __. A mí me importa, no sé como mierdas me ganaré a tu padre. 

Y ahí yo no sabía qué decirle. Yo tampoco estaba segura de como lo haría. No iba a mentirle diciendo que lo haría fácilmente, pero tampoco le bajaría todas las esperanzas como si fuera algo imposible. Hay formas, eso está claro.

- Ya lo lograremos, Justin –le alenté- Fuiste muy respetuoso con él a pesar de todo, te comportaste bien. Eso es muy importante, sobretodo para mi padre.
- Pero aún así me odia, me miraba de mala forma. Sé que es normal que lo haga, porque debe estar sintiendo que soy un loco detrás de su hija, no un amigo. ¿No te ha dicho nada de mí?

No iba a contarle lo que me dijo. “Oh, para nada, solamente dijo que no eras para mí, que chicos como tú no eran buenos y que si se llegaba a enterar de que teníamos algo dejaría la cagada”. 

- Me preguntó si teníamos algo y que por qué habíamos tardado tanto, estaba furioso, pero en ningún momento dijo que te odiaba –no era del todo mentira, porque jamás dijo esa palabra- Tranquilo, amor.
- ¿Estás segura? –preguntó dudoso.
- Sí, segura. Jamás lo dijo –afirmé.
- Bien, pero aún así no sé que hacer. Esto me frustra –sentí su voz de forma horrorosa a través del teléfono, se estaba conteniendo.

Un escalofrío recorrió mi cuerpo, pero esta vez no era por esos besos que me daba Justin, si no que era por algo malo. ¿Se había cansado de mí? ¿tan poco habrá durado su fuerte amor? Mis manos comenzaron a temblar y mis ojos quisieron humedecerse. No estaba lista para escuchar lo que me diría, pero no podía quedarme con esa duda tremenda, a pesar de que posiblemente me romperían el corazón en unos segundos más.

- ¿Me vas a terminar? –escupí con tristeza y molestia.
- ¿De qué hablas? 
- Lo que oíste, sé que lo harás. No vale la pena estar pasando por esto, es más que obvio, ya no lo ocultes.
- ¿Y es que tú estás loca?
- No lo estoy, pero presiento que lo harás –aclaré- Si sientes que es demasiado no dudes en acabar con todo, tampoco quiero que me tengas pena. Supongo que podré soportar la maldita ruptura.

No sabía de donde diablos me había salido tal coraje como para hablarle así y es que nunca se lo había dicho desde que comenzamos a estar juntos. Tampoco jamás fue necesario, no habíamos discutido desde esa vez en que me fui de su casa y no volvió en dos semanas. 

-__, no voy terminarte.
- ¿Y cómo se yo que no me estás mintiendo? Debí imaginar que no se podría. Estoy en una estúpida cárcel, no nos podemos ni ver, tengo que hablar en susurro toda esta maldita conversación para no ser escuchada, encima mi papá no quiere que estemos juntos y mejor no continúo diciendo todo lo que no hemos podido hacer.
- Te he dicho que no voy a terminar, no he pensado ningún momento en ello. No digas tonterías, te amo. Creí que lo sabías.
- Puedes amarme y todo lo que quieras Justin, pero soportar a una chica que tiene todos estos problemas de película con un padre sobre-protector no es lo más fácil del mundo, reconócelo.
- Sé que no es fácil, lo tengo más que claro. Pero no me voy a separar de ti, ni aunque me lo pida. Te amo, te pido que lo entiendas. No porque no le haya agradado en la primera significará que me rendiré como un puto cobarde incapaz de luchar por lo que quiere consigo. Sí, es cierto, estoy frustrado, y eso no es algo tan grande. Aún estoy firme en mi decisión de haberte pedido que fueras mi novia y eso no va a cambiar. No estoy aquí por tu padre, estoy aquí por ti. Cuando se entere de que estamos juntos no me interesará lo mucho que me deteste, porque yo vengo a estar contigo, no con él.

Confesaré que, a pesar de que sus palabras por poco me derriten como si fuera mantequilla, aún seguía algo inquieta. Tenía que confiar en él. Quería darle unos cuantos pellizcos por haber logrado que me pusiera así. Yo jamás pensé que me portaría así por un chico. Me sorprendí de mí misma. 

- Bien.
- ¿Bien? –quería más palabras de mi parte.
- Yo también te amo. Y lamento haberte dicho esas cosas, no sé que me pasó. Fue un momento de locura, solo olvídalo –pedía por el amor de Dios que lo olvidara.
- No lo olvidaré, es primera vez que reclamas por mi amor. Estará en mi memoria por siempre. Vaya, enserio que me amas –se echó a reír.
- No vayas a ponerte engreído, ah –rodé los ojos a pesar de que no podía verme.
- No es eso, simplemente me ha gustado. Me siento excitado.
- ¿No estás enojado? –me confundía que no lo estuviera, pero de pronto reaccioné- ¿Cómo que te excitaste?
- Bueno, no específicamente excitado de la forma en que mi genital esté emocionado, pero sí de la forma en que me da algo en el estómago y siento un poco de deseo de tenerte aquí a mi lado, entre mis brazos. Y no, no estoy enojado, ¿por qué debería estarlo? 
- De acuerdo. Y pues, ya te dije, por todo lo que te solté.
- No hay cuidado, ricura –y soltó una risita despreocupada.

Sentí que me sonrojaba. Iba a contestar lo primero que se me viniera a la cabeza para no quedar como una boba aún más grande y la voz de mi padre a través de la puerta me interrumpió. Agradecí al cielo haber puesto la cerradura.

- ¿Qué pasa, papá? –le pregunté en voz alta, esperaba que Justin entendiera que no podría seguir hablando en ese momento.
- ¿Estás hablando sola? ¿hay alguien ahí?
- No, no lo estoy –ya me sentía nerviosa- Es Dakota, al teléfono. 
- Bueno, necesito que bajes. Yo y Michelle tenemos que hablar contigo.
- Bajo enseguida, tú baja, ya voy –esperaba que me hiciera caso.
- No tardes –ordenó.

Y sentí que sus paso se iban por el pasillo, hasta que lo demás fueron sus pasos por las escaleras. Volví el teléfono a mi oído, deseando que Justin siguiera en la línea.

- Supongo que esto es todo por hoy –comprendió. Me sentía mal, bastante.
- Sí, lo es –ya me puse decaída- Pero a la noche podré conectarme y hablamos, ¿si? Te amo demasiado.
- Yo te amo más, shawty. Y te esperaré, para hablar. Adiós –me lanzó un beso, reconocí el ruído.
- Yo más, besito –le lancé uno de vuelta- Adiós.
- Adiós, mamasita –se echó a reír y cortó la llamada. Me había llamado mamasita y si estuviera aquí no dudaba que me lo habría devorado a besos y mordidas.

Ya que mi preciado padre había arruinado mi momento y no me quedaba más opción que ir abajo, fui. Obviamente. Salí sin nada de ganas de mi habitación y me dirigí a las escaleras. Cuando ya estuve en la sala de estar, me encontré con papá sentado en el sofá grande junto con Michelle. Veían el show de Ellen. Por un segundo pensé que ya no me necesitaban, pero justo escuché a mi papá volver a dar un grito ensordecedor. 

- ¡___! ¡Te he dicho que vinieras, hija! ¡Dije que no tarda…
- ¡Estoy aquí! –grité también yo, para que notara mi presencia. Giró su cabeza.
- Pues vente ya niña, acércate al sofá y estate sentada.

Se volvió hacia la televisión y puse los ojos en blanco. Cuando por fin estuve en el cómodo sofá, Michelle tomó el control remoto y apagó la televisión. Un poco de susto se adentró en mí, no era muy usual que nos reuniéramos abajo en completo silencio. Algo andaba mal, podría jurarlo.

- Hoy te levantaré el castigo –empezó- Solo por piedad, porque ha sido tu primera desobediencia cuando se trata de hora de llegada. 
- Tu papá quería darte al menos unos tres días de completo castigo, pero he logrado convencerlo –me dijo Michelle, riendo.
- Vaya, gracias –sonreí para ella, animada- Enserio gracias.
- Sí, como sea, pero eso no es todo –mi padre interrumpió mis palabras- Desde ahora no quiero que vuelvas a hacer todo lo que tu quieras. Tu amiga Dakota podrá venir a verte como lo suele hacer, y sobre ese chico Justin, puede venir, pero ya sabes las reglas. Aún así, espero no verlo seguido. 
- También es gracias a mí –Michelle alzó una mano. Solté carcajadas.
- Cariño, te llevas mi crédito –papá le tomó la mano y se la besó, para luego volverse hacia mí- Pero bueno, voy a confiar más en ti. Lo intentaré. 
-Me parece bien, espero que lo hagas –me sentía fatal, porque va a poner de su parte, pero yo sigo con la mentira- Te lo agradezco.
- Y al tercera cosa es que, ya has tenido bastante de vacaciones. Empezarás clases en casa entre estos días. La próxima semana, quizá. O en dos semanas, no lo sé. Tal vez en un par de días. No estoy seguro de nada. Estarás en casa todo el tiempo y no necesitarás salir. Habrá tranquilidad, como ya conoces. Los maestros vendrán a casa por la mañana cada día, menos el fin de semana. Nada ha cambiado.

Les contaré que, de haber recibido esta noticia hace mucho tiempo, habría estado tan feliz que comenzaría a gritar como una loca por toda la casa. Pero ya no, esto lo he detestado. Estaría en casa todo el tiempo, como antes, sin hacer nada. No vería nunca a mis amigos, pero lo peor de todo es que no vería a Justin. Ahora sí que todo era jodido. Pero una pequeña idea de ilusión llegó a mi cabeza, ¿qué pasaba si volvía a estudiar en la escuela? Tal vez podría estar con él un poco más, al menos por unos minutos. Si el se dignaba a ir a dejarme o a buscar, claro está. De todas formas, quería intentarlo. Lo que sea por él y nuestra felicidad.

- Pasa que… -comencé a dudar si él aceptaría- Ya no quiero clases particulares, papá. Quiero ir a la escuela, así como antes.

Sus ojos se abrieron como platos, al parecer había sido una completa sorpresa. Para mí también, porque jamás habría decidido volver a la escuela pública por mi propia cuenta. Me daba pereza hasta por los codos. Era algo nuevo tanto para mí como para él. Antes me pasaba todas las mañanas quejándome porque no quería levantarme tan temprano o porque me tocaba una materia que detestaba, o un profesor antipático y amargado. De todas formas, él me había dicho una vez que lo de estudiar en casa solo sería algo temporal. Eso me ayuda mucho para que esto, de algún modo, sea más creíble.

- ¿Quieres volver? –preguntó impactado- ¿para qué? 
- Porque tú mismo me habías dicho que solo sería un cambio de unos meses y que luego iba a volver sí o sí, ¿no te acuerdas?
- Bueno, sí me acuerdo. Pero jamás creí que querrías volver, siendo que te estoy dando la posibilidad en una bandeja de plata –tan testarudo.
- Te has equivocado, porque quiero volver. Matricúlame en la escuela en la que estaba, no quiero estudiar aquí –insistí firme.
- No sé, tengo que pensarlo. 
- Yo opino –se integró Michelle, casi habíamos olvidado que ella estaba allí- que __ tiene razón, tiene que volver a la escuela pública. Están sus amigos, sus conocidos, sus antiguos profesores y siempre uno termina extrañando todo eso, aunque por un tiempo uno lo deteste. Debería ir, me parece una buena idea, cariño –le explicaba a papá- Además, le servirá para despejarse. Tal vez necesita eso.

Amaba a Michelle. Podría ir hacia ella y abrazarla hasta sacarle sus tripas por la boca, pero no quería quedar como una sensible. Capaz me pondría a llorar, quedaría como una tonta y papá notaría que hay algo más que simplemente querer ir. Deseaba con ferocidad que de una vez por todas, aceptara.

- Ya que ambas están en mi contra –dijo con molestia, juntando las cejas-, voy a dejar que vayas a la escuela pública. Nada más voy a ver tu rendimiento, si bajas tus calificaciones, __, juro que te traeré de vuelta a casa arrastrándote por la calle. Tampoco quiero problemas con tus maestros, ni nada. 

La vista de mi padre se fue hacia el reloj que se encontraba en su muñeca. Puso una cara de confusión, y justo en ese momento una canción ridícula de cuna empezó a sonar desde la calle. Papá brincó del sofá. Era el furgón que solía pasar todos los días entregando el amasado.

- ¡El pan, mujer! –tomó a Michelle por la mano, tirándola hacia la puerta- Nos quedaremos sin la mierda de pan si no corremos, ¡que se nos va el carro!

Salieron por la puerta corriendo como unos salvajes. Quedé sola y la canción aún sonaba, por lo que no se había ido. Pero luego comenzó a oírse menos, supuse que se estaba alejando.

- ¡Eh, yo quiero pan! –papá gritaba a lo lejos-  ¡Mi pan! ¡Michelle, corre, alcánzalo! Yo no puedo, estoy muy viejo, ¡eh!

Salí de la casa y me asomé por la puerta que daba a la calle. Me jodía de la risa viendo como papá movía los brazos para que al menos lo notaran por el espejo retrovisor, mientras que Michelle corría como si estuviera en tal maratón. Mi felicidad había vuelto su lugar. Volvería a la escuela, pero lo más importante, estaría con mi chico del baño todo el tiempo que pudiese.

                                           _______________

¡He subido luego! No pueden quejarse, jaja. Ya ven que cuando puedo escribir, lo hago. Espero que lo hayan notado. Ha aparecido Justin solo por la conversación telefónica, pero cuando rayis entre a la escuela todo cambiará, o quizás antes. Las quiero sorprender. Únanse al grupo: https://www.facebook.com/groups/249293821904711/ Un beso a todas, mis niñas. Las amo. Besotes.  


18 comentarios:

  1. No jodas el pan jaja, me e cagado de la risa con eso jajaja Deoz santo LA RAYIS ESTARA CON EL CHICO DEL BAÑO. El ruzio a de tener mucho estres encima no? Pobre. Me fascino el capi chica! Todo cambiara cuando la rayis entre al cole... ME QUIERES MATAR?! LO HACES A PROPÓSITO VERDAD? LO HACES PARA DEJARNOS CON LA INTRIGA, ESO ES BULLYING TISHU ESO NO SE HACE u.u bueno bye

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Puedes pasar por mi novela

      www.tuhistoriaconjustindrew.blogspot.mx

      Eliminar
  2. :o QUEDO GENIAL, PERO NO SE SUPONE QUE MICHELLE ESTA EMBARAZADA Y QUE CASI TIENE EL BEBE, COMO ES POSIBLE QUE EL SEÑOR LA HAGA CORRER!!! POBRE MICHELLE LO VA A TENER ANTES DE TIEMPO :( THIARE SALUDOS SALUDOS PASATE POR EL NUEVO, YA SABES QUE!! DAME TU PUNTO DE VISTA!!! TE QUIERO MUCHOOOOO, Y TE EXTRAÑOOO BYEEEEE! KAHSKDHKAGDUYAJDF

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Puedes pasar por mi novela

      www.tuhistoriaconjustindrew.blogspot.mx

      Eliminar
  3. tishu, como siempre me encantó el cap.....no veo la hora de que rayis empiece la escuela, jajjaja. Sube cuanto antes y no nos dejes con la intriga!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Puedes pasar por mi novela

      www.tuhistoriaconjustindrew.blogspot.mx
      Ocupó lectoras!!!

      Eliminar
  4. Lo siento si no comente :c ajdhs Es que no pude :cc PERO AQUI ESTOY ajdjaka Estuvo super supeeer Supeeeeer con r ahsha Me encanto estan genial y tan agsaakal La amo Como todas ahsha SIGUELAAAA TISHU SIGUELAAA

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Puedes pasar por mi novela

      www.tuhistoriaconjustindrew.blogspot.mx

      Eliminar
  5. Hola!! Ya pude comentar!. Bueno,.Esta perfecto el capitulo. Seguila cuando puedas please"" Amo tu novela. Un gran besooo.

    Pd: PARA TODAS PLEASE LEAN MI NOVELA--> karlaswag34.blogspot.com GRACIAS!

    ResponderEliminar
  6. jajajajajaja lo que me rei no tiene nombre! Que lindo cap, sos una genia tishuuuu

    ResponderEliminar
  7. Me mato cuando el papa de la rayis salio corriendo y gritando que quiere pan jaja ese justin es todo un pevertido. Me encantó el cap Siguela :)

    ResponderEliminar
  8. Jajajajaj te quedo re bueno el cap!! Juro que me cague de la risa, umm y mi shastem me dijo mamasita, nada que me muero!! Bueno hermosa, que mas puedo decir? Perfecto como siempre, sigue con tu nove y sube cuando puedas. Un beso

    ResponderEliminar
  9. Puedes pasar por mi novela

    www.tuhistoriaconjustindrew.blogspot.mx

    ResponderEliminar
  10. Para cuando el proximo capitulo??? Me encanto re bueno!

    ResponderEliminar
  11. OMB! Tu novela es perfecta, comeze a leerla y juro! No me despegaba del móvil ni un segundo. �� por favor continualaaa ��
    Besos ��

    ResponderEliminar
  12. Me encanto tanto. Una pregunta Tishu. ¿Podrías pasarte por mi novelas? Please
    http://micanove-justinytu.blogspot.com.ar/
    Gracias, te quiero mucho, seguila la nove, es TAN HERMOSA :33

    ResponderEliminar