15 de febrero de 2015

Capítulo trece - Fresa con Chocolate.



Después de unos cuantos minutos decidiendo qué era lo que queríamos hacer, quedamos en intentar aprender a nadar. Yo no sé hacerlo, me ahogo de inmediato. Pero Fabiola es mejor que yo. No tanto, pero comparada conmigo, ella podría ser la diosa suprema.

- Tienes que recostarte en mis brazos, patalear y manotear como te indiqué, no debes parar, ¿Entiendes? -me dice ella. Yo asiento con la cabeza.
- Sí, no dejar de mover mis extremidades, lo entiendo -respondo nerviosa- ¡Pero voy a morir! Dios, ya no quiero hacer esto.
- No morirás, Cristal -suelta unas risas- Te sacaré antes de que mueras. Tú solo tienes que relajarte o ni siquiera podrás flotar.
- Amiga, ¿Estás hablando en serio? -me cruzo de brazos- ¡Si ni siquiera sé hundirme sin taparme la nariz! Se me entra toda el agua.
- Ya, pero tienes que esforzarte. Eres capaz. ¡Vamos!

Ella no se cansará hasta que le diga que sí. Lo de no poder hundirme sin taparme la nariz me parece una molestia. ¡Esa fue una de las razones por la cual me enojé cuando me hundieron hace un rato! No quise decirle a nadie, pero creo que inhalé un litro de agua. ¡La sensación es horrorosa!

Me recuesto en los brazos de Fabiola, quedando con mi cabeza fuera del agua y mi cuerpo dentro. Era una posición extraña. Fabiola se esforzaba por mantenerme a flote. No es que sea muy fácil tener todo el peso de una persona en una forma incómoda. Pero bueno, ella insistió.

- ¡Tienes que moverte! -me recuerda, y entonces comienzo a hacerlo. El intento es fatal porque comienzo a gritar en cuanto mi nariz toca el agua.
- ¡Amiga, no puedo! -chillo- ¡No logro flotar!
- Cristal, lo estás haciendo mal. ¡Más rápido! -exige, y hago lo que me pide pero soy tan mala que mi cuerpo se cansa al instante y comienzo a reducir la velocidad.
- ¡No, no puedo, me rindo! ¡Aahh! -me quejo cuando respiro y un montón de agua se me va hacia la boca y la trago- ¡Sabe a cloro!

Me salgo de los brazos de mi amiga y me pongo de pie como puedo, respirando con dificultad. De pronto siento un montón de risas tras de nosotras, y nos giramos. Seth y Drew lloran de la risa por mi momento dramático, que por cierto, fue un desperdicio total. Sin embargo, aunque me cueste, decido ignorar sus risas.

- Mejor muéstrame cómo lo haces tú, e intentaré hacerlo lo mejor posible -le digo.
- Bien -acepta Fabiola- Lo haré, pero tienes que poner atención.

Pone su cuerpo por debajo del agua y de pronto sale a flote. Intenta mantener con dificultad su cabeza algo afuera para poder respirar, nadando así como perrito, cosa que quería aprender yo hace unos segundos. Logra avanzar un metro y luego para. Acto seguido se pone de pie.

- No está nada mal, pero podrías mejorar -sincero.
- Sigo siendo mejor que tú.
- Bueno, sí -reconozco soltando risas, y ella ríe.
- Vamos a ver, chiquillas tontas -se mete Drew, de la nada, en nuestra conversación de chicas- El más maravilloso profesor de nado sincronizado, es decir yo -aclara, apuntándose con su dedo índice-, va a salvarlas de lo patéticas que se ven haciendo la cosa esa que sea que hagan.
- Nadie pidió tu ayuda, Drew -le recuerdo- Tú solo vuelve a tu lado de hombres.

Dicho eso, me empuja con fuerza a un lado sin que pueda hacer nada y se pone al lado de Fabiola. Miro a Seth, que también está acercándose a nosotros y mira la escena de mi hermano, con un aire divertido. No puedo evitar girar los ojos.

Fabiola

El sentir a Drew tan cerca de mí, de pronto me hace sentir nerviosa, y quizá hasta un poco incómoda. Sé que puede ser grosero, pero nadie le pidió que nos enseñara. Pero sinceramente, tengo grandes ganas de aprender a nadar bien pronto. Aunque una de mis ventajas es que puedo aguantar mucho tiempo sin respirar sin problemas.

- Vamos al extremo de la piscina -me dice Drew, creyéndose todo un instructor o jefe.

Sin esperar a que yo le responda, va hacia donde me indicó. Miro a Cristal, que está con el ceño fruncido, y se encoge de hombros. Sonrío divertida por su comportamiento. Pero decido hacer caso a Drew, solamente porque en serio quiero esto. Así que camino hacia donde él, y me pongo a un lado, a una distancia considerable.

- Solamente tienes que tirarte al agua e intentar avanzar, ¿Estás captando? -me pregunta, alzando una ceja. Luce serio, y es como que comienzo a creer que no está intentando hacer ninguna broma o inventar algo sólo para que me vea ridícula.
- ¿Eso no más? -pregunto dudosa.
- Sí. Tienes que hacerlo moviendo los brazos -dirige su mirada hacia donde están Cristal y Seth, uno al lado del otro, observando con atención- Ustedes dos también deberían memorizar lo que nosotros dos vamos a hacer para que no se ahoguen si un día viajan en un barco y éste se hunde.
- No tengo problemas con ello -dice Seth- Soy un buen nadador.
- Entonces va para ti, Cristal -dice Drew, riendo sólo para molestarla.
- No veo el problema si un barco se hunde. Siempre están los chalecos salvavidas -se excusa ella, haciendo una mueca, y agrega:- Además tengo ventaja, siempre mujeres y niños primero. Ustedes son lo que se van a ahogar.

Suelto carcajadas incontenibles, porque lo que dice es completamente cierto. Drew me mira con el ceño fruncido, creyendo que eso me hará dejar de reír, pero aún así no puedo parar. Cristal se une a mi risa.

- Ya, ya, si ya terminaron de reír como unas hienas locas, deberíamos aprender a hacer esta cosa ya -interrumpe Drew- Después de todo será una ayuda para ustedes.

Decido callarme y me aclaro la garganta. Drew se pone en una posición para lanzarse, por lo que yo intento hacer lo mismo. Se siente un poco raro hacer todo esto con su ayuda. Nunca habíamos hablado más de un saludo.

- A la cuenta de tres, te lanzas conmigo e intentas nadar hasta el otro extremo -indica, y yo asiento con la cabeza.

Uno, dos, tres... Y me lanzo. Trato de mover los brazos y piernas lo mejor que puedo, pero me cuesta lograr sacar la cabeza un momento para respirar, y eso es lo que yo quiero lograr, porque lo demás siento que lo hago como se debe. Pero festejo cuando llevo al extremo debido y salgo a la superficie.

- ¡Lo hiciste! -grita Cristal, feliz por mi logro- ¡Eres toda una profesional!
- No es una profesional -Seth le lleva la contraria- Sólo lo logró.
- ¿Es una mosca la que habla? -se pregunta Cristal, poniendo una mano en su oído- Porque yo no te he preguntado nada, bocón.

Parece que Seth va a decirle algo, pero luego deja su boca abierta sin decir nada, la cierra y se queda callado. Aguanto mis risas, porque es sorprendente que alguien se detenga a meditar sólo para no discutir con ella, tragándose todo el orgullo. Eso no es lo normal.

- Estuviste bien -me dice Drew- No tanto como yo, pero aún así.
- Gracias.
- ¿Alguna vez en tu vida hiciste natación?
- Sí. Bueno, por la escuela a la que iba -le cuento- Nos obligaban.
- Con razón. Porque te mueves bien. No entiendo como una chica tan pequeña y frágil puede haberlo hecho. No se te nota.
- Uhm. El que no lo demuestre físicamente no quiere decir que no lo haya hecho.
- Ya veo. Estoy impresionado -sonríe satisfecho- ¿Te parecería venir a nadar conmigo a la piscina del centro algún día?

Me quedo estupefacta. Primero que nada, está teniendo buenos modales y segundo, me está invitando a ir a nadar con él. ¿Está pasando algo de lo que no me he enterado? ¿Drew está siendo agradable conmigo? Cristal me dijo que jamás era así con alguna de sus anteriores amigas.

- Oh, pues, yo... -trago saliva, aún en otra dimensión- De acuerdo.
- Bien. Porque debe de gustarte nadar, ¿Verdad?
- Me encanta, lo adoro en sí.
- ¡Pues ya estamos! -exclama entusiasmado- No puedo creerlo.
- ¿No puedes creer qué?
- Eres la primera chica que acepta ir a nadar conmigo.

Me quedo callada, porque no sé qué decir. Miro a Cristal, y está prácticamente con la boca abierta. No sé si es porque he aceptado la invitación o por el actuar de Drew. Seth, por otro lado, está sonriendo de oreja a oreja.

- Vaya, hermano -Seth comienza a hablar- Por fin encontraste a una chica que comparta ese afán tuyo. No lo desperdicies.
- No lo haré -responde Drew, casi con la misma sonrisa.
- ¿¡Alguien puede explicarme qué es lo que sucede aquí!? -grita Cristal, tan fuerte que Drew llega a hacer una mueca. Yo sonrío un poco- ¿Desde cuándo te gusta nadar?
- Desde que me he ido en las vacaciones de éste año a la casa de nuestra tía -nos cuenta.
- ¿Y por qué pasó eso? -vuelve a preguntar ella.
- ¿Qué coño te importa a ti? -comienzan a responderse mal.
- Tienes razón, no me importa -Cristal se cruza de brazos.
- ¿Vas a querer hacer lo que hice yo con Fabiola? -le pregunta Drew, dejando de lado la pequeña discusión- Dilo.
- No. Pensándolo bien, no quiero -responde.
- Vamos, Cristal, tú puedes -la animo, y ella me mira algo dudosa- Con el tiempo te irá saliendo bien. No es la gran cosa que no puedas todavía.
Mantiene su mirada fija en la mía por un momento. Luego suspira, y mira hacia el agua. Sé que es un poco difícil para ella. Hacer algo que no le entusiasma mucho, que no sabe hacer, y encima en frente de muchas personas no es su fuerte. Termina encogiéndose de hombros, sin una expresión de ansias en su rostro y voz.
- Está bien -responde- Voy a intentarlo.
- Vas a ver que vas a mejorar -le digo, intentando hacerla sentir mejor. Y parece que lo logro, porque sonríe y asiente con la cabeza.
- Te toca hacerlo con Seth -dice Drew, y Cristal abre los ojos como plato.
- Pero creí que era contigo.
- Será con Seth, porque yo ya tengo mi pareja de natación -le dice.

Al parecer Drew se está tomando muy a pecho lo de la natación. Pero por alguna razón no me molesta. A mí también me agrada tener a alguien que quiera hacer conmigo algo que me gusta. Nunca lo he hecho con un chico.

Cristal mira a Seth algo nerviosa, y él sólo se limita a asentir, como diciéndole que está bien. Ambos se acercan al extremo, y Cristal se aleja más de lo debido de él. Sus expresiones en su rostro muestran inseguridad, pero nadie más parece darse cuenta. Yo obvio no digo nada.

Cuando Drew se pone a contar y llega al número tres, ambos se lanzan al agua y comienzan a nadar. Digo, Seth lo hace. Pero como Cristal no sabe hacerlo, se termina poniendo de pie al llegar a duras penas a la mitad de la piscina. Se pone la mano en la nariz. Debe de haberle entrado agua. De pronto me siento un poco mal por ella. Seth ya está parado en el extremo. Él sí es muy bueno haciéndolo, tanto como Drew, por lo que pude ver.

- En las siguientes podrás haber avanzado un poco más -me acerco a ella, y la abrazo por los hombros.

Sé que se siente desilusionada. También sé que quizás, si ella quiere, algún día aprenderá a nadar. Pero no sé si llegue a superar su miedo.

- No lo creo -me dice ella- Soy pésima.
- Es cierto, eres pésima -se mete Drew- Yo creo que peor que eso.
- No la molestes -le pido por lo bajo.

La tarde sigue pasando rápido, entre ciertos juegos y burlas entre Drew y Seth, que me hacen reír. Cristal también lo encuentra gracioso, pero se niega a reír como lo hago yo. En parte será porque no quiere darles tal satisfacción a ellos de saber que los encuentra graciosos, pero también es porque sigue sintiéndose mal por su fracaso en aprender a nadar. Lo intentó algunas veces más, pero ninguna le salió. Y terminó rindiéndose. No es usual en ella. Quizás se sintió presionada por tener más de mi mirada sobre ella.

El anochecer llega, y aún somos los únicos en la casa. Comienza a hacer frío y digo que ya tengo ganas de salirme. Todos están de acuerdo, sintiendo que la brisa ha empezado a salir. El primero en hacerlo es Drew. Al ya estar fuera toma una toalla y se rodea con ella, intentando cubrirse del frío. Sin esperar a nadie, asiente con la cabeza y entra a la casa.

La que sigue soy yo. Pido que nadie mire y subo y luego bajo la escalera, para luego cubrirme con mí toalla. Miro a mi alrededor. Todo de pronto está en silencio.

Cristal

Me quedo mirando fijamente el agua de la piscina, viendo cómo se va poniendo más quieta una vez que hay menos personas dentro de ella. Alzo mi mirada y Fabiola sigue mirando hacia todos lados, como si hubiese visto algún fantasma o cosa extravagante. ¡Está loca! Sonrío sin poder evitarlo. Ella es tan tierna, es una cosita adorable.

- Voy a estar en tu habitación secándome y poniéndome mi ropa -me avisa cuando se gira en mi dirección- Te espero allí.

Sin darme cuenta ya caminó hacia la casa y está entrando por la puerta de ésta, Mis sentidos de alerta se activan con rapidez.

- ¿Qué? ¡No! -le pido- ¡Fabiola, no me dejes sola con él! Sabes que no me... -y dejo de hablar, porque ya ha juntado la puerta y escucho sus pasos subiendo por la escalera del interior.

Me quedo en silencio. Y cuando lo hago, hay aún más silencio, tanto que es un poco escalofriante. Me abrazo a mí misma, protegiéndome de la brisa helada. De pronto me siento intimidada. Y nerviosa, e incómoda.

Espero a que Seth salga de la piscina. Pero los segundos pasan, incluso un par de minutos, y no hay ningún movimiento. Me niego a salir antes que él, o a romper el silencio. ¿Por qué tengo que sentirme así cada vez que estoy a solas con él? No es una sensación que me guste, ni que esté acostumbrada a sentir. Sólo me pasa con él, y eso me preocupa. Él da miedo. Sobretodo con lo que me hizo el otro día. No puedo soportar este sentimiento.

Suelto un suspiro, impaciente porque decida irse y dejarme sola aquí. Pero pasan aproximadamente cinco minutos, que se hacen eternos, y cada vez estoy más impaciente y sofocada.

- Puedes salir tú primero, Cristal -dice su voz.

Mis manos comienzan a temblar de tan sólo escucharla. Dios, ¿Por qué a mí? ¿Qué he hecho para que me afecte tanto su presencia solitaria? Trago saliva, preparándome para fingir que estoy de lo más bien. Que no pasa nada. Que por gusto me he quedado parada como una tonta en medio de la piscina.

- Está bien -respondo, y me lamento al instante, porque me ha salido distorsionada.

No digo nada más, y comienzo a avanzar hacia la escalera, a un paso tan lento que impresiona. Apoyo una de mis manos en ella. Subo uno de mis pies al primer escalón, y luego el otro al mismo. Suelto otro suspiro. Estoy nerviosa.

Pero me pongo aún más nerviosa, cuando siento una respiración tras de mí, en mi oído. Un ligero calor corporal hace que el frío en mi espalda se vaya, incluso sin que esté haciendo contacto. Me estremezco y mi piel se eriza. No lo sentí acercarse. Que no haga nada malo. Por favor.

- Lo haz hecho bien, Cristal -susurra, de una forma casi inaudible, que no ayuda en nada. Mi respiración se vuelve un poco pesada, y cierro mis ojos, apretándolos tan fuerte como puedo- Nuestro leve roce cuando toqué tu abdomen, ha sido un paso más para ti, pequeña. No tienes de qué temer.

Aprieto aún más mis ojos. Intento salir desesperada de la piscina, pero mis piernas no reaccionan. Nada en mi cuerpo reacciona. Todo queda en silencio, pero sigo sintiendo su respiración. De a poco voy abriendo mis ojos, y noto que apoya una de sus manos cerca de la mía, pero no me toca.

- Sólo quiero ser tu amigo -concluye, con el mismo tono casi inaudible. Dios.

Y eso es suficiente para que reaccione. Con toda mi fuerza interior, continúo subiendo la escalera y bajo rápidamente después. Agarro mi toalla, aún con mi cuerpo temblando, y me rodeo con ella. Me preparo para caminar adentro. Sé que está observándome. Pero tengo que dejarle claras las cosas. Nada va a hacerme cambiar de opinión.

- Yo no tengo amigos hombres, y tampoco quiero tenerlos -suelto, dándole la espalda, sin atreverme a mirarlo- Pero gracias por las mentas del otro día.

Y sin más, me voy hacia la entrada de la casa, respiro hondo, subo las escaleras y me voy hacia la seguridad de mi habitación, dejándolo solo allá afuera.

♥♥♥

Les dije que subiría el Domingo, y aquí tienen el capítulo. 
Espero que les haya gustado y que me lo hagan saber. ¡Muchas gracias por leerme!
Recuerden, +5 comentarios para que suba el Martes, o no lo haré.
¿Qué opinan sobre el acercamiento que están teniendo Seth y Cristal?
¿Y qué opinan sobre Drew y Fabiola?
¡Un beso! Son preciosas.

8 comentarios:

  1. Hola Tishuu! Me encanto el capítulo y me gustan las parejas que se están formando. Además esta bueno que se dejen de pelear un poco. ;) espero el CAP del martes
    Cat

    ResponderEliminar
  2. Holiss <3 aw me encanto el cap hacen una linda pareja <3 Quiero que se acerquen cada vez más <3 J&C :3 Hermosio.
    Se Te Kiere <3
    Besus <3
    Chaolin <3

    ResponderEliminar
  3. Me gusto muchoo el caitulo de verdad cada dia lo entiendo mas y cada dia amo mas esta novela se te quiere muchote besos cuidate

    ResponderEliminar
  4. Siguelaa me encantaa<3<3

    ResponderEliminar
  5. Me encanta :'c síguela pronto

    ResponderEliminar
  6. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  7. Holiii!
    Ahora si e podido comentar,AL FIN!
    Me encanto el capitulo. Habeces Cristal es pesada,pero supongo que tiene sus razones,pero aun así me encanta tu novela^^.
    Te Quiero!

    ResponderEliminar
  8. Holiii!
    Ahora si e podido comentar,AL FIN!
    Me encanto el capitulo. Habeces Cristal es pesada,pero supongo que tiene sus razones,pero aun así me encanta tu novela^^.
    Te Quiero!

    ResponderEliminar