13 de abril de 2015

Capítulo veintisiete - Fresa con Chocolate.

Capítulo dedicado a Sara Santos: ¡Ojalá hayas pasado un feliz cumpleaños!
y a Iris Anabalón:  Aquí estoy, no desaparecí JAJA.



Abro los ojos, y lo primero que hago es volver a cerrarlos. Me quejo en voz baja. ¿Anoche he olvidado cerrar la cortina, que está toda abierta y me entra toda la luz? Papá siempre me recuerda hacerlo, ¡Anoche no lo ha hecho! Debo regañar su actuar.

Me volteo un poco bruscamente, y de inmediato siento como todos mis sesos se sacuden dentro de mi cabeza. De la molestia y dolor, la sujeto con mis manos, quejándome aún más. ¿Por qué yo, de todas las personas del mundo, tengo que estar así? Aunque bueno, muchas personas están así un domingo por la mañana, pero porque eso es lo que ellos quieren. ¡Pero yo no lo pedí, así que no cuenta!

Una palabra se viene a mi mente: Drew. Menudo capullo, hijo de la trola, bastardo... ¡Oh, por Dios, qué he dicho! La trola sería mi mamá. Merezco morir. Como mi madre se entere, uy, vaya que se va a enojar. Menos mal nadie puede oír mis pensamientos. ¿Hola? ¿¡Hola!? No, nadie.

Activo mi sentido del olfato. ¿Por qué mi almohada huele a perfume de macho? Si yo no ocupo éste. Es más, me pongo un poco cuando me acuerdo y es olor a flores. Me incorporo en la cama con mucho cuidado, para que no se me sacuda todo de nuevo. Cuando estoy bien sentada, comienzo a recordar.

Lanzo un grito tan fuerte como mis cuerdas vocales me permiten. Es tan fuerte, que tengo que volver a agarrar mi cabeza con fuerza, porque llega a hacerme doler. ¡Todo ésto es por Seth! Estuvo en mi habitación, me vio vomitar la porquería de todo un año, me cambié de ropa en frente de él y para colmo casi me lo como a besos. Que vergüenza, Cristal, ¡Qué vergüenza! ¿Dónde están tus modales?

Me pongo de pie de la cama, soportando otra sacudida de sesos, y comienzo a tocar todo mi cuerpo en caso de que algo falte. ¿Mis bragas están puestas? Sí. ¿Mi sostén? Uhm, no. No está. ¿No está? ¿Me lo quité en su presencia? Dios mío.

Tomo mi celular, deslizo el dedo y marco el número de Fabiola. Golpeo el piso detenidamente con mi pie, entrando en pánico. He quedado como la bruta del siglo. ¡No lo soportaré! ¿Y por qué no contesta?

- ¿Aló -escucho su voz.
- ¡Al fin! -exclamo- Fabiola, no sabes lo que me pasó. Estoy en una depresión post-muerte.
- Oh, ni que lo digas. Drew me llamó y me lo ha contado todo. Estoy llegando a tu casa -suelta unas risas sonoras.
- ¡Chica, Dios tiene que haberse apiadado de mí, enviándote! Yo te llamo para una charla desesperada, pero el que vengas es muchísimo mejor. Dios te bendiga, hija. Dios te bendiga.
- Aguarda, ¿Estás predicando? ¡Esa cosa que bebiste sí que debe de haberte afectado! -grita- Pero ya, nos vemos en unos minutos -y corta la llamada.

Camino por la habitación de aquí para allá, pensando en si hay algo que no he recordado, en si se me ha escapado algo, pero no, nada sale a flote.  Pero antes de eso, aprovecho de buscar un sostén y ponérmelo. No quiero que se trasluzcan mis senos. No tengo tanto, es poquito la verdad, lo suficiente, ¡Pero aún así! No por eso voy a andar dejando que todos me las vean, ¡Ni muerta!

Narra Fabiola

Troto por las calles lo más lento que puedo para no cansarme. Se me olvidó traer dinero para un taxi desde el centro a la casa de Cristal, así que sólo me alcanzó para el autobús y me deja a unas cuantas cuadras. He decidido venir porque me ha dado algo raro saber lo que le pasó, aunque debo admitir que igual quiero reírme un poco de ella, para que no sienta tan mal ni se lo tome tan en serio. En ocasiones es muy dura consigo misma, y no quiero ni imaginar como se pondrá de aquí a unas horas o días más.

Cuando llego al lugar, abro la puerta que da de la calle al jardín, y luego me detengo en la puerta de la casa, respirando algo agitada, con las manos apoyadas en mis rodillas y mirando al suelo cabizbaja, porque soy pésima para ésto del deporte. No es tan así, pero bueno, simplemente no me gusta.

Me sobresalto cuando la puerta se abre de golpe. Alzo mi cabeza y un Drew muy sonriente está frente a mí. Me pongo derecha, y disimuladamente finjo mirar a mi pecho, pero en realidad quiero saber si huelo mal o algo con o que sudé. ¿Cómo supo que llegué?

- ¡Fabiola, viniste! -exclama, haciéndose a un lado para que yo pase. Lo hago de inmediato, y luego cierra la puerta tras de mí- ¿Cómo estás?
- Bien, acabo de transpirar un montón. Olvidé para un taxi -le cuento algo nerviosa. Es increíble que aún no pueda desenvolverme bien a su lado- Pero a pesar de eso todo va muy...
- Debes de estar cansada, lo sé porque luces un poco roja -me dice, antes de siquiera dejarme terminar- Te traeré jugo. Pero oye, puedes subir a ver a Cristal y yo te lo llevo para allá.

Se aleja de mí, en dirección a la cocina. Me percato de que la casa está en total silencio. Drew es muy atento, tanto que me da una sensación extraña. El estómago se me encoge cuando estoy cerca, y el que actúe de ésta manera lo provoca aún más.

Decido hacerle caso, porque para eso he venido. Así que voy hacia las escaleras y las subo. Pero casi me da un infarto cuando, al llegar al último peldaño, algo o alguien me empuja contra la pared, poniendo los brazos a los costados de mi cabeza. Suelto un grito ahogado cuando me percato de que es Seth.

- ¿Conocías a Cristal cuando le pasó todo eso? -pregunta amenazante- Estoy seguro de que sabes de lo que hablo.
- Suéltame, me pones nerviosa -le pido, porque en serio, no es que Seth sea alguien muy difícil de ignorar, menos de ésta forma- No sé de lo que hablas.
- Ella me contó mucho anoche sin desearlo -me dice. Abro los ojos como plato. ¿Tan lejos llegó ella? ¡Dios mío, no creí que fuera para tanto!
- Júralo -ordeno, sin quitar mi expresión de asombro.
- Fabiola, ¿Qué...? -escucho la voz de Cristal. Miro en dirección de donde proviene, y la noto refregando sus ojos con sus manos, justo en la entrada a su habitación.

Cuando me nota a mí, completamente atrapada por el cuerpo de Seth, pone una expresión de horror, y parece que se va a desmayar. Pero me quedo desconcertada cuando vuelve a entrar en su habitación, y más aún cuando vuelve a salir y trae con ella un bate de béisbol.

- ¡Violador! -grita- ¡Sabía que eras un violador! -corre hacia nosotros, empuja a Seth con toda su fuerza a pesar de que no logra que se mueva nada, e intenta golpearlo.
- ¿Qué? -Seth me suelta e intenta frenar sus golpes con sus brazos- ¡No intentaba eso!
- ¡Maldito, aprovechador! -logra darle en una pierna- ¡Fabiola, corre a mi habitación y protégete! -sigue golpeándolo- ¡Este tipo está desquiciado!
- ¡Cristal, lo vas a matar! -le grito, queriendo que se detenga- ¡No me hacía nada malo!
- ¿Cómo que no? -se detiene, pero apunta a Seth con el bate, que se encuentra algo enojado, apuntándolo como si fuese un arma- ¡Si lo que yo he visto pareció otra cosa! -se gira a Seth- Quédate quieto o llamaré a la policía.

Seth no hace caso, se acerca a nosotras y arranca el bate de las manos de Cristal sin el más mínimo esfuerzo. Ella lanza un grito desesperado, y me cubre con su cuerpo, queriendo que yo esté a salvo. Así que para aligerar el ambiente, la tomo por los hombros, girándola hacia mí, y la miro fijamente.

- Escucha, amiga. Nada malo sucedió -le digo- Solamente Seth me estaba preguntando una cosa.
- Pero no entiendo, ¿Quién pregunta de esa manera? -luce confundida- No me fío de él.
- Anoche no parecía eso -escupe Seth, evidentemente más enojado que antes.
- Cállate, no estoy hablando contigo -le responde Cristal.
- No discutan, no entiendo nada del asunto. ¿Qué sucedió entre ustedes? -pregunto, casi al borde de la locura. Detesto estar en medio de algo que no sé.
- Te sorprenderías -suelta Seth- Pero alguien aquí no quiere reconocer nada.
- ¿Cuál es el problema contigo? -Cristal se gira en su dirección- Que yo sepa, no pasó nada que sea digno de contar. Dices cosas que no son.
- ¿Estás segura? -Seth alza un ceja, y se le acerca- ¿Estás jodiéndome?
- ¡Aléjate! -ella se echa para atrás, en lugar de él.
- Fabiola, aquí está tu jugo... -Drew aparece en la escena por las escaleras, y cuando nos ve a los tres con el ceño fruncido, suelta un suspiro- Vamos a mi habitación.
- ¿Qué? -pregunto.
- Que vamos a mi habitación, gatita -me toma por la cintura y me arrastra con él.

Sin darme cuenta, ya estoy en su habitación y él asegura la puerta con pestillo. Un poco de miedo se adentra en mí, no es que sea para menos, considerando todo lo que pasó allá afuera y de la nada llega él, prácticamente me trae sin mi consentimiento, me llama gatita y para suavizar la situación tiene un vaso de jugo entre sus manos. Me lo tiende, y lo acepto algo dudosa.

- Esos dos tienen un problema de hormonas que deben solucionar -me cuenta- Pero que bueno que vinieras, me habría molestado estar solo mientras ellos dos se dicen cosas.
- Sigo sin entender -sincero, pegada contra el escritorio de Drew, mientras él se sienta relajadamente en su cama.
- Anoche Cristal bebió una cosa que no debió, obvio contenía mucho alcohol. Se puso ebria, y tiró muchas secretos personales de ella sobre Seth. Él la ayudó hasta que se durmió, y bueno, yo, como todo hermano cotilla que soy, escuché todo.
- ¿Qué exactamente le dijo? -pregunto.
- Todo sobre el maricón ese que estuvo con ella, incluso estuvieron encerrados en su habitación, pero eso ya es un tema aparte, porque me encerré aquí y pasé de ellos totalmente -se pone a reír. ¿Dónde está la gracia? Todo es mi culpa, yo fui la que abrió la boca y provocó que pensara en él más de la cuenta, pero que va, ¡Amigas por siempre! ¿Cierto? Sí, no creo que me odie por ello.
- Ah, bueno, eso ya está mejor, comienzo a entender. Cuando me llamaste sólo me dijiste que estuvo ebria -le digo, soltando una sonrisa.
- Supongo -se encoge de hombros, y lentamente se va poniendo de pie- Pero ahora hablemos de nosotros, que esos dos se vayan a la mierda.

Mi corazón se comienza a acelerar nada más al escuchar esas palabras. Drew se viene acercando a mí con decisión, como si yo fuera un indefenso gato y él un perro feroz, listo para atacar. El corazón se atasca en mi garganta y me limito a hacerme más para atrás, pero el escritorio me lo impide.

- ¿Pasa algo? -pregunta, alzando una ceja. Se detiene frente a mí, y acerca su mano a mi cintura. El aire se me va- Estás tensa.
- ¿Nosotros? -es lo único que me atrevo a decir.
- Sí, nosotros, nada más que nosotros -aprieta su agarre contra mi cintura, y de pronto me siento demasiado encerrada, con mucho calor.
- No hay un nosotros -le recuerdo. La voz casi ni se me escucha, ¿Qué me pasa?
- Que lo haya, entonces -dice con seguridad- Apostaría para que tuviéramos algo, tanto, que dejaría que apostaras por un No habrá, y yo esforzarme hasta ganar con mi Sí habrá.
- Drew...
- ¿Drew? -sonríe un poco, pero una vez más, yo no veo la gracia.
- Tú no eres así, estás comportándote extraño -le digo.
- Oh, estaba esperando el momento indicado, pequeña Fabiola -esboza una sonrisa aún más grande- Lo astuto que soy te podría dejar impresionada. Planeé hasta lo del jugo.
- ¿Qué? -abro los ojos- ¿Cómo podrías planear eso? -ahora estaba un poco molesta.
- ¡Todo fue parte de mi plan! -dice orgulloso- Si te dejaba pensar que era un tonto muy atento que no se daba cuenta de nada, aceptarías estar más cerca de mí, y funcionó. Por poco fracaso, pero míranos ahora. Indefensa en mi habitación.
- ¿Quieres decir que fingiste todo? -intento ocultar mi voz molesta.
- No -niega con la cabeza- Claro que no. A lo que me refiero es que quise que tuvieras un poco más de confianza en mí, y sólo iba a lograrlo si iba a paso lento. Lo de tus padres, y mi atención hacia ti eran completamente verdad, pero a poca velocidad. Si me tiraba como un tigre sobre ti, te iba a espantar.
- Me estás espantando ahora -confieso, temblorosa.
- ¿Y por qué no estás corriendo? -pregunta, y ahora rodea mi cintura con ambos de sus brazos y se adhiere a mí. Mi respiración se detiene- ¿Va a ser necesario que nos emborrachemos como esos dos? -suelta risas- Espero que no.
- Yo no bebo -mi poca capacidad de habla en este momento es lo que me molesta más ahora- Sólo un poco de vino, en ocasiones.
- Me alegro de eso -acerca su rostro a mí, y siento que voy a morir. Ni siquiera puedo moverme, estoy totalmente tiesa- No temas de mí. Tú y Cristal son tal para cual, ambas parecen haber sufrido y creen que todos vamos a hacer lo mismo con ustedes.

Drew hace un movimiento tan rápido con sus brazos que no alcanzo a reaccionar. Solamente me percato de que una de sus manos sujeta mi cuello con decisión, y abalanza su boca contra la mía, dejándome completamente capturada por él.

Nada más al primer contacto, siento que un montón se sensaciones estallan dentro de mí y se esparcen por cada cavidad de mi cuerpo. La sangre me hierve, mis manos sudan y de pronto es como si estuviera pasmada, como si no supiera qué hacer. A pesar de eso, cuando logro entrar en razón, comienzo a corresponder su beso como si mi vida dependiera de ello.

Mi cintura permanece rodeada por uno de sus brazos, mientras que su otra mano la mantiene en mi cuello, pero termina deslizándola por entre mi cabello, queriendo sentir su textura y suavidad, atrayéndome aún más a él.

Me estremezco cuando muerde mi labio inferior y suelta un gruñido. Sé que se da cuenta, porque aprieta su agarre y hace que nuestro beso se vuelta totalmente apasionado. Llevo mis brazos a su cuello y ahora soy yo la que lo trae a mí. Jamás había tenido un beso tan increíble como éste. Llego a desconocer lo sexy que me parece, lo atractivo y caliente que es, sobretodo cuando Drew me alza en el aire y me sienta sobre su escritorio, para luego adentrarse entre mis piernas y hacer que estemos completamente adheridos el uno al otro. Puedo sentir su cuerpo y de pronto siento una calor insoportable.

Por poco me alejo cuando siento que Drew desliza una de sus manos por debajo de mi camiseta holgada. De no ser porque me lo impide, seguro lo habría hecho. Su dedo recorre con delicadeza la zona de mi columna vertebral, desde arriba hacia abajo, lentamente, y vuelve a intensificar nuestro beso. Pero justo entonces, se detiene en la parte baja de mi espalda, y hace presión con la yema de sus dedos, como queriendo que se queden pegados a mi piel. Es cuando nuestros labios comienzan a separarse, y una sensación de malestar crece en mí. Yo no quiero que se acabe.

Había besado a otros chicos antes, pero jamás había sido de ésta manera, menos cuando apenas es el primero. Mi respiración está un poco entrecortada, mi estómago parece un remolino y cuando alzo mis ojos para verlo, me pregunto qué es lo que siento por él.

Narra Cristal

Cuando mi mejor amiga y Drew se encierran en su habitación, Seth y yo nos quedamos en completo silencio. Pero cuando él se da la vuelta y baja hacia el primer piso, todo está más silencioso aún. De pronto me siento un poco sola. Algo triste, también.

Estoy realmente aburrida de ser como soy. Siento que no encajo ni con mi hermano. No soy idiota, sé que él tiene sentimientos por Fabiola, y aunque ella no lo reconozca o quizás ni siquiera se ha dado cuenta, puedo sentir que hay algo dentro de ella que brilla a causa de él.

Con esto puedo llegar a la conclusión de que me quedaré totalmente desamparada o algo así. No es que me moleste, me haría muy feliz que ella pueda volver a querer o incluso amar a alguien. ¿Pero y yo? ¿Qué pasará conmigo? Vamos a alejarnos. Nadie me soporta.

Unas enormes ganas de llorar se apoderan de mí. Doy todo mi esfuerzo por mantener mi rostro sin ninguna expresión, y porque mis ojos dejen de humedecerse, pero se me hace tan difícil que fracaso; La primera lágrima cae por mi mejilla.

Seco mi rostro con mi brazo, y suelto un suspiro frustrado. ¿De dónde viene esa tristeza? Porque no es sólo por esto que pienso. Creo que hay algo más, pero no sé lo que es. Así que me decido a ir abajo. Es mejor que quedarme desconectada del mundo, tan solitaria y penosa.

Encuentro a Seth sentado en el sofá, mirando fijamente el florero de la mesita de centro, tan concentrado que me pregunto en qué pensará. Y eso hace que recuerde todo lo que le conté anoche, por lo que la idea se me hace insoportable y estoy desesperada por decir algo al respecto.

- Seth -le hablo, con voz calmada. De inmediato se sorprende, y sus ojos se dirigen hacia mí.
- Dime.
- Recuerdo muy bien lo de anoche -sincero, y eso parece llamar su atención, porque endereza su postura y sigue atento a lo que digo- Pero nada fue cierto, ni lo del maldito abusivo imaginario. Nada más te dije puras porquerías, me pareció divertido jugar con algo así -miento de tal manera que me duele- ¿Está claro?

Lucho por lucir decidida y segura de mis palabras. La mirada fija de Seth hace que las cosas se me hagan un poco difíciles, pero gracias al cielo logro mi objetivo. Cuando lo veo asentir con la cabeza, mi cuerpo se relaja un poco.

- Lo sé -se limita a responder.
- ¿Lo sabes? -suelto, y me maldigo a mí misma por no mantener mi boca cerrada- Digo, ¿Cómo supiste?
- Estabas ebria, tu mente procesó cosas sin sentido -se encoge de hombros- No es nada.
- Y lamento haber intento besarte o algo -trago saliva- No tengo intenciones ni nada de eso.
- Bien.

Dicho eso, me dirijo hacia un sofá individual y me siento allí. Llevo mis rodillas al mentón, y abrazo mis piernas con mis brazos. Sé que Seth me mira, pero escondo mi cabeza entre mi cabello, queriendo demostrar que he dado el tema por acabado. Porque así son las cosas: No hay nada más que decir.

♥♥♥

¡Hola! Aquí un capítulo, sé que seguro pensaban que no iba a publicar, pero ya ven que he cumplido. ¡Ha sido el primer beso de Fabiola y Drew! Estoy muriendo, literalmente. Espero que les haya gustado tanto como a mí. No olviden comentar, y estaré de vuelta por aquí pronto. Las quiero un montón, besos para ustedes, muaaah. 


15 comentarios:

  1. No tengo palabras para describir lo que estoy sintiendo en este momento. ❤️ Literalmente, he muerto y he revivido al leer el capítulo. ❤️ ¡HUBO BESO! ¡Sigo sin poder creerlo! Todo es tan asdfghjklñ que no puedo evitarlo. ❤️ Te adooro un montón, gracias. ❤️ Al leer esa parte, me acordé de esa personita y no pude evitar sentir lo mismo. :c

    ResponderEliminar
  2. Me ha encantado este capitulo, enserio, pero tambien observo que cada vez la arrogancia de cristal va hacer que justin o se vuelva locamente enamorado de el o le pierda, y la verdad que me encanttaria que me dedicaras un capitulo, lo estoy pasando bastante mal por un niño y, estas consiguiendo distraerme y que sonria por lo menos al ver esta novela, mil gracas por escribir, y no lo dejes, eres bastante buena y haces que nos podamos meter muy enserio en la historia, ya que hay otras que nno consiguen eso, tu lo haces y con mucha facilidad, gracias, no tengo ma palabras.

    ResponderEliminar
  3. OMB OMB OMB OMB MI CAPITULO!!! QUITENSE TODAS PORQUE ES MIO!!!! MIO MIO MIO MIO MIO MIO MIO.... Bueno saliendo de mi shock inicial... Que ***** te pasa?!?! Como lo dejas alli!!! Es justino le tiene que llegar a cristal o te mato con una botella de vidrio que me encuentre x)... Se me hace tierno que el justin le diga lo que quiere oir pra que ella tenga paz interna, no aguanto pot el proximo capitulo, siguela tan pronto puedas esta buenisisisissiisima... Por cierto ese Drew no es tonto, me gusto mucho su primer beso esta asdfghjklñ que bueno que ellos si estan haciendo algo 🙌🙌🙌 pero como cristal ouede pensar lo de Fabiola! Osea si se como x) y porque, pero nooooo, ella es de justin y justin de ella, asi tenga que matar gente para que suceda!!! Siguela pronto esta duper buena

    ResponderEliminar
  4. Pd. Gracais por el capitulo me hiciste el dia 🙌🙌🙌

    ResponderEliminar
  5. OmG esta hermosa siguela la ame plissss <3

    ResponderEliminar
  6. OmG esta hermosa siguela la ame plissss <3

    ResponderEliminar
  7. OMG!!!!
    Drew y Fabiola se besaron Dios esto es tan fjdkdñs al igual que ellos dos espero que Justin y Cristal se besen pronto .... Me a encantado el capitulo,espero que subas pronto, te quiero,adiós.


    By:Esca

    ResponderEliminar
  8. Me encanta siguela :) soy Ari.BELIEBER FOREVER.

    ResponderEliminar
  9. La amoooooooooo! Enserio te pasaste esta vez, no puedo despegar mis ojos de la computadora. Sube cuanto anteees =)

    ResponderEliminar
  10. lanslansksnwnzjzks, amé los dos capítulos por completo, sube pronto tishu;(

    ResponderEliminar
  11. Siguela!! Me enchants tu novela y como escribes<3

    ResponderEliminar
  12. Diossss me encanto el capitulo. Me gusto como fue el primer beso de Fabiola y Drew juajujujsuja. Espero el proximo capitulo. Siguela. Estoy un poco apuradita.
    Se te Kiere <3
    Besos <3
    Chaolin <3

    ResponderEliminar
  13. me encantooo sigueelaaa

    ResponderEliminar
  14. Omg muero primer beso....casi muero me gusto mucho el capitulo me pareció gracioso lo del bate jajajajaja muero se te quiere un monton muchos besos aplastantes cuidate y sigueeela :*

    ResponderEliminar
  15. Holuuuus!!! Hayyy,el capítulo fue hermoso! Completamente extraordinario!Por favor,no podes dejararlo asíi,estoy totalmente ansiosa por el próximo,que todavía no llegaaa.Seguila pronto sii? Te juro que me encanta muchísimo tu nove,es genial!!!

    ResponderEliminar